La estrella Johnny Depp mostró su lado más vulnerable al recordar la enfermedad que hace ochos años atrás puso en peligro la vida de su hija Lily Rose, fruto de su relación con la ex modelo francesa Vanessa Paradis.

A los siete años, Lily Rose fue hospitalizada con una infección por la bacteria E. coli, pero logró recuperarse.

Fue durante una entrevista con el presentador Graham Norton, que el actor fue consultado por las visitas solidarias que hacía a hospitales de niños vestido como su famoso personaje del capitán Jack Sparrow.

Depp explicó que aquellos recorridos los realizaba desde hace muchos años, pero que fue tras el internación de su hija que decidió hacerlo más seguido. Con la voz quebrada, dijo que fue el "momento más oscuro" de su vida.

"Después de lo que ocurrió con mi hija, hacerlo se volvió más importante. Los niños son fuertes, muy valientes, pero los padres son los que mueren de a poco", continuó Depp, de 52 años.

"Ser capaz de llevarles un poco de alegría, una sonrisa aunque sea, a esas personas significa el mundo para mí", declaró Depp, que se encuentra en plena promoción de Black Mass, su último trabajo en el cine.